Podio Septiembre 2012

El podio de este mes es muy "inn": tira de cerveceras muy en boga, y además mete una colaboración. Parece que no eres nadie hasta que no haces una cerveza con alguien del otro lado del charco, o, si es de este lado, con otros 2 o 3 a la vez. Estas colaboraciones salen normalmente de ciertas convenciones que acaban a veces en borracheras, y algunas de ellas con resultados interesantes, así que viva la experimentación... Vamos allá con ellas.

- Mikkeller 黑 / Black

El tercer escalón del mes lo ocupa el escandinavo más universal en el mundillo cervecero con una de sus creaciones más oscuras y radicales, a la par que de nombre más sencillo: su "negra".

Ya cuento los antecedentes de esta cervecera en otra entrada del blog (buscar la entrada de la Boogop). Poco más que añadir a esto, salvo que Mikkel se quedó solo porque el señor Keller vendió su parte (craso error por su parte, visto cómo ha evolucionado), y ahora aquél se dedica a hacer lo que le da la gana en su pequeña "cocina" en Copenhague, a fabricar cervezones allende los mares (sigue sin tener fábrica propia, siendo aún gipsy, cuckoo, nomad o como se quiera llamar), y a viajar y descubrir sabores nuevos por el mundo para incorporar a sus cervezas. Envidia cochina...

Esta cerveza, Black (negra en castellano, o 黑 en chino, como aparece en su etiqueta), es una de sus grandes creaciones: una Imperial Stout de unos nada desdeñables 17.5%, ostentando el dudoso honor de ser la cerveza de más graduación de toda Escandinavia. Pese a tener todos esos grados, el alcohol no es tan notorio como uno esperaría, aunque aparece en el aroma y en el sabor hacia el final. Por el medio, notas de una Imperial Stout como mandan los cánones: chocolate, algo de moka, vainilla... Espuma sedosa y poco persistente, muy poco gas, y aromas también puros de una stout. Y un punto inusual en estas cervezas y que le da un carácter particular hacia el final es el uso de levadura de champán. En mi opinión, esta cerveza está mejor en barril, como pude yo tomarla, ya que para mi gusto todas estas stout ganan en barril respecto a botella (probablemente, por rebajar el gas aún más de lo normal, y concentrar aún más el sabor; aunque a lo mejor son manías mías...). Queda pendiente probarla en botella (¿alguien se ofrece a regalármela?). Definitivamente, un petróleo en toda regla...



- Hoppin’ Frog / De Molen Super-Charged Saison IPA

Colaboración de una de las cerveceras yankees que más suenan por estos lares (lo tienen más fácil a base de dar brincos) y otra de las referencias europeas, la holandesa de Molen.

De la cervecera de la rana saltarina/lupulera ya he hablado anteriormente (ver la entrada de la Frosted Frog Christmas Ale), y en este caso realiza una excelente colaboración con los holandeses del molino. De Molen, con ubicación en el medio de la "campiña" holandesa, en concreto en el pueblecito de Bodegraven, tiene su edificio y fábrica en torno al histórico molino De Arkduif, de finales del XVII.

Aparte de la fábrica cuentan con un restaurante y un pequeño "bar" para probar sus cervezas; además, organizan un glorioso (por el elenco de fábricas presentes) festival, cuya 4ª edición ha tenido lugar recientemente. La cabeza pensante de la cervecera, Menno Olivier, lleva 12 años haciendo cerveza, menos de lo que a priori cabría prever probando sus creaciones.

La Super-Charged Saison IPA, como su nombre indica, es una cerveza con una base de Saison, pero con una buena dosis de lúpulo, concretamente Citra y Amarillo en dry hopping, y unos nada desdeñables 10 grados... Total, que al final el cuerpo original de una Saison, con sus típicos afrutados y notas de levadura, van tornando a tonos más maltosos y dulces, con un final algo alcohólico y una generosa presencia de los habituales matices de Citra y Amarillo: pino, resina... Visto que "EE.UU. se encuentra con Europa", como reza la etiqueta, esperemos que se siga encontrando más veces.


- Cantillon Mamouche


La probablemente más famosa de las cerveceras de Lambic de la región bruselense aparece esta semana con un merecidísimo primer puesto con, cómo no, una de sus lámbicas que tan difíciles resultan de beber a un gran número de personas, y que a unos pocos nos vuelven locos.

Cantillon, fundada en el año 1900, es una de las más reputadas cerveceras belgas por su maestría en la elaboración de cervezas lámbicas, es decir, de fermentación espontánea (para quienes no sepan lo que es, básicamente, las levaduras viven en el aire y fermentan el mosto que se deja al aire libre). Se vanaglorian de seguir usando las mismas técnicas y maquinaria que usaron en su fundación.

Sus sellos principales: algo más de un tercio de la malta es de espelta (variedad de trigo), usa lúpulo de 3 años en muy poca cantidad, y después de la fermentación espontánea, guarda todo en barrica durante al menos 3 años. Su fábrica es digna de una visita; barriles, botellas, polvo y la oportunidad de probar algunos de sus néctares in situ.

La Mamouche se encuadra dentro de una de sus líneas de cervezas más experimentales, llamada zwanze (que es una palabra que se refiere a una forma de ser burlona típica de Bruselas), a la que añade ingredientes más o menos extraños. La Mamouche es el experimento de 2009, en el que añadió en frío (en una especie de dry hopping) flores de saúco. el resultado, espectacular. No deja de ser una lámbica, con esa espuma tan densa y persistente, y el ácido tan marcado; pero aporta unos matices florales, probablemente por el saúco, realmente espectaculares. Sin ninguna duda, la mejor lámbica que he probado.

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Se quedan en diploma olímpico cervezas como Haandbryggeriet Dark Force, To Øl Mochaccino Messiah, De Molen Kopi Loewak Coffee Stout y Omnipollo/Nómada En El Bosque (y no necesariamente en este orden).